lunes, 30 de septiembre de 2013

Platicas del joven Laibinez.



Platicas del joven Laibinez

 con Eugenio Coșeriu.

(obra en un acto de interes linguistico)









E

Escena:  - en una antigua biblioteca de la ciudad de Timisora, 
de esas en las que las gentes aún pasaban horas de dolores en espaldas y piernas
 a cambio de unas horas del alimento espiritual. 
( pues como aún  el Parque Hologramático no se caminaba para leer 
y este invento estaba en aquellos tiempos aún en construcción.)
 Allí los seres humanos mascaban el lenguaje a joroba y yema, 
en frente de una fría computadora y otro montón de amontonados libros.  


Personajes de la obra:

Andrei López: maestro de la universidad en la facultad de Filosofía, grande amigo de Laibinéz, amistad que comenzaron desde el primer año de entrenamiento con el equipo de la Poli-Timisoara.

Don Eugenio Coșeriu: viejo amantes de las letras pero muy poco dado para su uso, y más para su análisis. Nacido y crecido en Rumanía

Laibinez Parvan: Director de la facultad de Derecho, miembro  honorario del parlamento Banatéano,  que es un organismo no gubernamental implicado en el desarrollo cultura y político de la zona. Delantero en el equipo de football local con participación cada viernes y entrenamientos de tres veces por semana, acordeonista y miembro de honor de la filarmónica Dan Iornadescu.


Bogdana de Parvan: esposa del señor director Laibinez, nacida en la frisca región de Moldova, donde las mujeres son sutilmente recias, benditas entre la maldición melancólica, como de arranque español y cortesía mexicana, en fin, era dama muy bella a la que todos la tenían por casta y bronca mujer.




Primer  y único acto :

·El objeto lingüístico de un furtivo encuentro·.




Señora Parvan: ¡Vaya cabeza mía y luengo corazón! , no te dicho lo mucho que me molesta que tu andes creyéndote alegrías con éstos libros. Te han venido ha buscar los de tu parlamento, y andan requeté enojados porque ni te supieron encontrar. Yo les dije todas las señas que me diste pero mira, resultó que no andabas por ahí.


Dr. Laibinez: Calla Bogdana, no vez que vas a desconcentrar a los pocos concentrados dé está biblioteca, ya mucho ruido les causé yo por andar a todo lo que daba éste mecanógrafo.


Señora Parvan: pues mucho será el ruido pero pocas las palabras, que junto con sus letras alcanzarán a ésta que se preocupa a voz por el mismísimo amor de su marido.

Dr. Laibinez: ¡Bogdanita, mujer, pero si yo te amo también!, sólo que nuncamente se puede predecir todos los cuidados.  Iba tolondreando al borde del Bega cuando me recibí un correo de Don Eugenio Coșeriu,  rápido me lancé para acá para alcanzar mejor señal del Cosmotel y responderle, y antes de todo el trajinar del sol en el día aquel mensaje lo tuve por más importante, así que  lo puse en prioridad y lo dejé así, olvídeme pues de lo más con intención pura de hacerlo menos a su medida y hacer esta carta toda bien.

Andrei López: Hola Dr. Laibinez, peor que gusto es verlo por éstos lados, pensé que ya se había ido para Basarabia, como lo dijo tan serio la ultima vez, pues yo me quedé pensando mucho en que sí el señor Cuanda hubiese proyectado voluntades más allá de la ciudad de Tomis seguro sus paisanos andarían dándole ritmo a su intención ahí entre los rusos y los taikonautas


Dr. Laibinez: ¡es que deso se trata!, vengo ya de recibir la respuesta del Señor Eugenio Coșeriu. Así que he resuelto en lo siguiente. Andrei, me parece que la monada nunca desapareció.

Andrei López: ¿pero que dices si Otto Jespersen se hubiera enterado de lo que escribió Eugenio estaría totalmente de acuerdo. Las relaciones geométricas del lenguaje recaen en la creatividad continua del individuo y su capacidad de lenguaje, según la unidad de Humboldt, en comparación con el modo descriptivo de Saussure, el cual entiendo definido como asolado y fijo

Entra Eugenio Coșeriu a la biblioteca.

Eugenio Coșeriu: claro que se enteró Otto, Humboldt y Saussure de todo lo que he dicho, al menos fue mi intención hacer que se enteraran. No quise plagiar nada pero fue el caso que tuvimos las mismas concepciones sobre la dualidad en el objeto del acto lingüístico. La lengua es una abstracción nuestra y su singularidad se está estableciendo continuamente a través de la relación del macro y el micro. El idioma es el núcleo básico de la sociedad y la lengua es aquella unidad particular que opera en cada individuo.




Andrei López: Mas Eugenio porque sacar tus justificaciones dualistas sigilosamente a favor de la desaparición de la monada. Hiciste la misma trampa con el compañero Vossler para resucitar malamente a Humboldt y lo hiciste un poco bien por dejar el mecanismo de Saussure allí en ese lugar estéril.

Eugenio Coseriu: cada uno de nosotros vamos realizando ciertos secretos, nuevas interpretaciones sobre los viejos conceptos se adueñan más rapido de otra lengua de lo que se estan creando; si Ferdinand de Saussure utilizó metáforas para decir que el individuo no puede ejercer una influencia cuantitativa en el lenguaje fue porque así lo percibí y otra gran parte de ello así fue, porque el hablando no puede cambiar los signos pero sino inventarlos

Señora Bogdana: ¡A ver aquí es donde todos los personajes estudiosos de las lenguas se encuentran! En las salas de una biblioteca. ¿todos aman los libro no?.

Todos: …sí.

Señora Bogdana: entonces hagan pleno acto del amoroso fin que comparten por la lengua. Apoyen  el progreso en la técnica moral a través del adstrato en vez de combatirlo, exporten e importen conceptos de otras lenguas para engrandecer el lenguaje de la humana raza. Recuperen la importancia de la unidad en la isoglosa si tanto les importa, a través de las confluencias de las lenguas las patrias del mundo pueden desarrollar individualmente la comunicación en los corazones de los hombres.







viernes, 6 de septiembre de 2013

En algún lugar de junio del dos mil once.




 

En algún lugar de junio del dos mil once.


Los personajes están actuando en escenas distanciadas una de otra, y aunque Nassim Haramein realizó los principios de los que habla Sky Shield, ni uno ni otro se conocen y yo me pregunto si será necesario que Jaques Fresco y Larouche sigan tan distanciados a pesar de cargar con la misma intención de la época y apoyo de toda una generación. Nosotros somos los autodiligentes, la generación que renunció al sistema asolado y recuperó su educación a través del Internet. La mayoría se perdió. Nosotros los autodiligentes somos los que evadimos la publicidad y la fanfarronería, todo con tal de concentrar y asociar lo que se otorga a todos los que buscamos el conocimiento de la felicidad. Es cuestión de estudiar el trabajo de éstos hombres, el último fruto de nuestro tiempo, ellos nos otorgarán la unidad de la semilla que propagan, es cuestión también de tiempo, cuando todos los personajes que actúan el mismo acto se reúnan en el plató y surja una nueva generación que aprenda sus técnicas y la presente todas en una sola escena: esto es a lo que dedicó mis esfuerzos, a transformar la información en experiencia y ella en conocimiento, para luego desde ahí crear el siguiente movimiento de acción econartista o arteconomía. Lo eterno que surge como algo nuevo. Zeitgeist fue un preludio y es ahora un símbolo, Larouche fue un controvertido y ahora todos sin saberlo se convierten a larouchismo. Vivimos en una geometría que desarrolla toda una nueva generación, nosotros los que nacimos después de revoluciones, aprendimos a aceptar su herencia y desechamos comunismo, capitalistas, socialismos y democracias por igual, hoy conozco tres éstos tres pilares para la educación del nuevo sol:

1.-Que se estudie la teoría de la unificación del Proyecto Resonancia, para comprender el origen y función de la tecnología en el desarrollo del alma humana.
2.-Para desarrollar las formas y estructuras de las ciudades que habitarán estos nuevos humanos acudan luego al Proyecto Venus.

3.- Y para dibujarse una justa idea de lo que será la nueva economía apoyen sus horas para agarrar en estudio la propuesta de Lyndon Larouche: puente entre tres mundos, el viejo progreso, el del presente decayendo y el futuro retorno.

Somos una época entre tres tiempos y para ello son mayor precisión y justicia, Nassim, Fresco y Larouche: ninguno de ellos se conoce uno al otro, pero nuestra generación los estudia para que entre los tres puedan generar el primer dialogo que romperá los colores del viejo cielo que nos dibujaron encima ya hace más de quinientos años, para cubrir la eterna escena que es el Universo.